Todavía me parece ver los ojitos de los niños de la Escuela 14 DE Nº 1 “Cornelio Saavedra”, con su entusiasmo, junto a sus padres, familiares y Mabel, esperando el momento de protagonizar ese maravilloso momento de leer textos hermosísimos, escogidos por ellos, guiados por Mariana, al pasaje del “TRANVIA DE LA LECTURA”…
El tranvía nuevo!!! Fue cordialmente escogido por “Los amigos del tranvía” “porque tiene calefacción y mesitas muy paquetas, aunque no es última generación…”
-Esto nos contó en esta bella, pero fría tarde, Aquilino que de esto, sabe un montón, pensando en el confort de sus pequeños pasajeros…
¿Los boletos? ¿Es que no sacaremos boletos? El guarda como en el pasado, repitió la ceremonia de cortarnos un boleto a cada uno, de su pieza de museo, un simbólico boleto, que trajo una evocación: -¡HE SACADO CAPICUA!
La Srta. Cristina, de su caja, como un mago de las letras, devanó un primer cuento… y se inició la sesión entre aplausos y alegría.
Con la curiosidad de niños, todos miramos las vías por donde con lento andar y casi sin ensuciar, se puso en marcha el tranvía…
De pronto… se detuvo, casi en medio de la calle:
“-La luz! Se ha cortado la luz...!”
-¡Qué oportunidad! ¡Al mal tiempo: adelante los lectores!
De pronto se abrió la puerta y con amable sorpresa, descubrimos que llegaba La Supervisora Lidia Samos, ¡Nos había alcanzado!
Seguramente el tranvía, presintió que ella venía y se detuvo en silencio, ya que sabe que ama escuchar muchas poesías…
Seguimos la marcha alegres y uno a uno, los chicos se presentaron para ofrendar sus lecturas y hacer presentes autores como: Gustavo Roldan, Elsa Bornemann, Verissimo, Melina Flores alumna de 6º grado y su “PRINCESA VIOLETA” además historias de autores anónimos y así entre “El baile de las sombras”, “La Bendición del dragón” “Cien patas”, una que otra “Broma”, “Novia electrónica”, “La guitarra olvidadiza” y esos “Viejos interminables” con su llamado al respeto:
…“porque quien desea que lo respeten debe empezar por respetar”, decía un personaje…
En un viaje sin igual, cambiamos a otra unidad, pudiendo así comparar en cada uno su estilo, es del 55, y aquél, el de la calefacción…
“Que nunca te falte el fuego, el agua y el amor” Y que todo lector siempre encuentre,
un espacio en un tranvía,
para que pueda descubrir, que habrá un futuro mejor…
mientras un niño sienta el placer de leer,
en una tarde de sol…de su ciudad
cualquier día…
2 comentarios:
Hola y Felicitaciones !!!!! Me encanta la idea !! Puedo sumarme a Uds, ??? Teresa, Maestra
Al Tranvía???
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